Se obtiene el aceite
de la presión sobre la cáscara del fruto.
Es el preferido de los
niños.
Reanima,
da alegría, vitalidad, creatividad.
Disminuye depresiones
y ansiedades.
Establece conexión con
el niño interior.
Fortalece, da entusiasmo.
Ideal para ambientar
en momentos donde se necesita inspiración, intuición y creatividad.
Volver
|