Trabajando con las flores ... OAK

Rasgos generales (algunos coincidirán con usted, o lo harán en su mayoría, trate de hacer una mirada genuina, sincera, hacia su interior, repensando estos conceptos)

Luchador, un roble, sobrecarga propia: son las palabras que primero se nos vienen a la mente cuando hablamos de esta flor.

Luchador. No se dan por vencidos. Son "un roble". No soportan mostrarse débiles, llorar, etc. Tiene espíritu de ayuda, no puede defraudar a nadie.

Luchan pese a todo, por su bienestar, intentarán una cosa tras otra, aunque estén enfermos no aflojan. Aunque su salud dependa de ello, no descansará. Ignora las señales de dolor y cansancio que su cuerpo le manda con desespero.

Nunca se rinde, lucha y trabaja hasta que colapsa...

La flor ayuda a tomar consciencia de la posibilidad de no asumir tantas responsabilidades, tanto trabajo. De reconocer nuestros propios límites.

Valientes, responsables y confiables. Adictos al trabajo, no delegan. No se quejan ni reprochan. Si no se están haciendo las cosas bien, o falta algo más no dudan en agregarse más trabajos sobre su hombro. No exigen a los demás sino a sí mismos.

Con el tiempo se ponen austeros y empobrecidos, son máquinas de producir, no se permiten momentos de descanso, es espartano. En él se apoyan todos, por eso se cree imprescindible.

Se contracturan los hombros, el cuello, propensos al estrés y colapsos nerviosos

La flor se utiliza para fortalecer. Es un gran energizante.

La pregunta: ¿Le parece que la vida es una dura lucha?

Desarrolla aspectos masculinos: fortaleza, tenacidad, resistencia. Está en desequilibrio con aspectos femeninos: ayuda a los demás, aprender a entregarse.

Util en casos de colapso nervioso, surmenaje, embolias, depresión, hernias, infartos, hipertensión, contracturas.






La persona feliz
sabe que no tiene que hacer de todo
para alcanzar la felicidad,

sino lo que fue llamado a hacer
para alcanzarla...