Rasgos generales (algunos coincidirán con usted, o lo harán en su mayoría, trate de hacer una mirada genuina, sincera, hacia su interior, repensando estos conceptos)

Exceso de entusiasmo. Fanatismo. Tensión.: son las palabras que primero se nos vienen a la mente cuando hablamos de esta flor.

Tienen principios e ideas un tanto fijas, están seguros de tener la razón. Desean convencer a cuántos le rodean. Tiene una gran fuerza de voluntad. Llegan al agotamiento, y aún así siguen adelante.
Sienten la necesidad de hacer todo lo mejor posible. El exceso de entusiasmo lo agota. Tiene mucha dificultad para relajarse. Se lo toma todo muy a pecho.

La flor modera el exceso de entusiasmo, equilibra la pasión y el fanatismo. Ayuda a aflojarse y alivia la mente de ideas fijas.

Discutidores, competitivos, tercos, querellantes, carismáticos. Imaginativos, idealistas, se enceguecen y a veces no ven la realidad.
No le interesa dominar sino convencer.

Muy activos, no paran, hacen muchas cosas a la vez. Se tensionan, tienen dolores de cabeza, contracturas, duermen poco. No se pueden desconectar, son como una topadora, sin medias tintas. Duerme poco pero no sufre por eso. Se lo ve nervioso, irritado, tenso.

No soportan injusticias y defienden a los más débiles. A veces hasta actúan por otros. No soportan la mediocridad.

También se utiliza para estados intensos de amor odio. Neurosis obsesiva. Resfríos. Problemas circulatorios en las piernas (por sobrecarga energética en la parte superior del cuerpo). Hipertensión. Apatía sexual. Desinflamatorio. Migrañas. Actúa también como analgésico (muela, artritis, rinitis, etc.) También para la fiebre.

Útil en el preparto por su cualidad relajante. Y en casos de muerte: ayuda a aceptar la sensación de injusticia del destino.