Trabajando con las flores ... CENTAURY

El motivo de estas actitudes no es otro que el deseo de reconocimiento, de sentirse querido por los que le rodean.

De lo que no llega a darse cuenta la personalidad centauro es que sirviendo sólo a los deseos de los demás deja de lado la realización de su propia tarea en esta vida.

La virtud de Centaury de entregarse a una misión, en estado negativo está mal entendida, y en vez de servir a través de su propia alma, se entrega al servicio de las debilidades humanas. Debe desarrollar su individualidad y madurar su personalidad a través de su voluntad, para ser un instrumento del alma.

Centaury es una de las personalidades más sensitivas y sensibles. Es por ello que puede caer fácilmente bajo la influencia de los "maestros iluminados", que ni son iluminados ni son maestros. Esta esencia ayuda a recuperar el contacto con la propia voluntad. En estado positivo, puede entregarse y servir a una buena causa, pero siempre sabrá reconocer dónde están los límites y cuándo debe decir no.

La lección que todo Centaury debe aprender es la Firmeza, aprender a mostrarse firme y poder decir no a las exigencias e intentos de explotación de otras personalidades que sólo buscan alguien que satisfaga sus deseos.

* Sabe cuándo debe decir sí, y también sabe decir no en el momento oportuno.

* Se integra bien en grupos, pero sin perder su identidad.

* Sabe establecer el límite entre ser servicial y servil.

* Sirve a los demás de una manera sabia y discreta, siguiendo los dictados de su guía interior.

* Puede consagrar su vida a su verdadero cometido.


Que cada uno recuerde que su alma ha dispuesto para él un trabajo particular, y que a menos que realice ese trabajo, aunque no sea conscientemente, dará lugar inevitablemente a un conflicto entre su alma y su personalidad, conflicto que necesariamente provocará desórdenes físicos.

Dr. Edward Bach

Cuando un guerrero aprende a parar su diálogo interno, todo es posible, hasta los proyectos más descabellados se vuelven factibles.

Carlos Castaneda

 

 

El alma de CENTAURY (de Dr. Edward Bach – Historia de caminantes)

“La humilde y pequeña centaura quería aligerar tanto la carga que estaba dispuesta a llevar el equipaje de los otros. Desgraciadamente, y por regla general, se suele llevar la carga de aquellos que se encuentran en la mejor situación para llevarla ellos mismos, ya que son siempre los que más se quejan…
[…] Finalmente todos lograron salir del bosque. Ahora viven como guías para todos aquellos caminantes que nunca han hecho ese viaje… en calidad de “valientes caballeros”. […]
y la centaura sigue buscando al más débil, que lleva la carga más pesada.”