Rasgos
generales (algunos coincidirán con usted, o lo harán en
su mayoría, trate de hacer una mirada genuina, sincera, hacia su
interior, repensando estos conceptos)
Exceso
de amor. Posesión. Retención: son las palabras
que primero se nos vienen a la mente cuando hablamos de esta flor.
Se aferran a quienes aman, lo hacen por protegerlos, porque los aman muchísimo,
pero no se dan cuenta que además lo aprisionan, y sin querer lo
asfixian. Es el prototipo de la "Madre Universal".
Cuando
está en positivo nos muestra una capacidad de amor inigualable,
pero en negativo registra una carencia de afecto impresionante.
Se enojan si no logran lo que quieren, terminan siendo mártires,
y sufriendo muchísimo. Esto les pasa porque esperan mucho de los
demás. Crea culpas (inconscientemente, sin querer) en el otro para
que haga "lo que debe hacer" y responsabiliza a otros de su
estado emocional o enfermedades.
De primera impresión es dulce y amorosa. Es que su interior está
lleno de amor, pero de un amor mal encauzado, un amor que produce daños
a sí mismo/a y a quienes lo rodean. Por eso la flor conecta con
el amor incondicional.
Vive haciendo reclamos, porque en realidad siente una carencia afectiva
enorme, lo que lo hace posesivo. Ejerce un chantaje emocional, inconscientemente.
Sienten lástima de sí mismos, cuando en realidad tienen
mucha fortaleza, necesitan autodescubrirse. Necesitan redireccionar tanto
amor y pensar más en sí mismas, y van a descubrir un hombre
o una mujer fuerte que no necesita de otro. Necesita aprender a amarse
a sí misma, en forma autosuficiente, genuina, necesita aumentar
su fe en sí misma y en los que la rodean. No exigir la atención
del otro, sino la de sí mismas. Es el prototipo de la “mamá
judia o italiana”.
Sienten mucho miedo al abandono. Y esto las puede llevar a una posición
complicada: a sientirse víctima de la circunstancia, y por eso
sin querer terminan manipulando, quejándose y sintiendo que es
una molestia para los demás.
En contraposición a esto son personas fuertes.
Por lo general suelen comer con avidez. La flor ayuda a amar sin sobreproteger,
sin desear poseer al otro, alienta el amor con respeto y desapego.
A
veces no existe toda esta historia aquí narrada, no se trata de
hijos, solo hay una necesidad de soltar "algo"...
La flor ayuda a soltar algo a lo que se aferra. Algo que no se puede desprender.
Para personas que llevan mucho tiempo en un trabajo y están apegados
a él.
Para aquellos que lloran con facilidad. Depresión postparto por
tener que desprenderse del bebé. Para situaciones de Duelos. Retención
de líquidos. Sinusitis. Estreñimiento. Retrasos menstruales.
Adicciones. Mujeres con problemas de estrógeno. Alergias, problemas
dermatológicos, migrañas, diabetes, displacia mamaria. Problemas
cardíacos.
Para quienes tienen un cuidado excesivo con la casa.
La pregunta clave que uno debe hacerse con esta flor es: ¿Le parece
que da mucho mas amor del que recibe?
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